Morir al sur, de Gabriel Velázquez Toledo. Chiapas Noir

 

Cuando hablamos de género negro en México, por regla general pensamos en dos regiones muy concretas del país: la Ciudad de México y la frontera Norte. Incluso hay casos esporádicos de escritores situando sus historias policíacas en otras regiones del centro, como Puebla (Juan Hernández Luna), Morelos (Gerardo H. Porcayo), Michoacán (Víctor Solorio Reyes) o Jalisco (Diego Petersen Farah), sólo por citar un puñado de ejemplos. Sin embargo, cuando se habla de la frontera sur, es decir Chiapas, hasta hace muy poco la literatura noir era prácticamente inexistente. Durante mucho tiempo la única obra destacada era la novela La Mara, de Rafael Ramírez Heredia, escritor originario de Tamaulipas. En los últimos años esto ha cambiado gracias a autores como Ney Antonio Salinas y Gabriel Velázquez Toledo.

Gabriel Velázquez Toledo debuta con Morir al sur (Nitro/Press, 2022), novela que en 2020 obtuvo el Premio Nacional de Novela Negra “Una Vuelta de Tuerca”, otorgado por la secretaría de cultura de Querétaro y en 2023 fue nominado al Premio Silverio Cañada a primera novela que otorga la Semana Negra de Gijón, festival señero del género en lengua española. Un reconocimiento que nos habla de una obra más que notable.

¿Pero de qué trata Morir al sur? Nos narra la historia de Santiago, un periodista de Tuxtla Gutiérrez, quien en 1993 comienza a investigar una serie de asesinatos cuyas víctimas son transexuales. Al mismo tiempo, en la zona de San Cristóbal de las Casas la repentina irrupción de un grupo de indígenas para derribar la estatua de un conquistador español es el pistoletazo de inicio de un movimiento más grande gestado en las profundidades de la selva chiapaneca. Así es como Santiago termina involucrado en una oscura trama que involucra intereses políticos, narcotráfico y el comienzo de la guerrilla zapatista.

Lo primero que llama la atención del libro es lo conseguido de la atmósfera noir. Pues a través de su prosa precisa y elegante, logra que la soleada capital chiapaneca aparezca como una ciudad de claroscuros, decadente, misteriosa y, en la cual, acechan peligros en cada esquina. Muy distinta de las estampas turísticas que suelen verse desde fuera de dicho estado. El autor nos pasea por toda clase de lugares sórdidos, como moteles de mala muerte, cantinas cochambrosas, tétricas morgues, siniestros cuarteles de las fuerzas de seguridad, etcétera.

Aunado a este ambiente, está el sabio uso de los recursos del género, como la hibridación. La novela inicia como una historia noir típica, con un detective (un periodista en este caso), investigando un asesinato que, pese a su sordidez, es aparentemente simple, pero que al final se tornará en una historia mucho más compleja y oscura, convirtiéndose casi en un thriller de espionaje. Quizá el punto más débil sean sus personajes, quienes son demasiado arquetípicos y no destacan demasiado, pero están construidos con la suficiente solidez y cumplen su función sin problemas. Y no me molestaría leer más aventuras de Santiago y su grupo de amigos, pues de cierta forma, su dinámica de convivencia me evocó al grupo de amigos de Mario Conde, el detective del escritor cubano Leonardo Padura.

No obstante, quizás el elemento más destacado es su temática. Gabriel Velázquez Toledo se atreve a narrarnos mucho del contexto de Chiapas y, sobre todo, de su población indígena. A través de su libro empezamos a entender un poco más del origen del movimiento zapatista que irrumpió en la vida nacional en enero de 1994, y cuyos efectos aún hacen eco a día de hoy. Y lo mejor es que no lo hace de una forma didáctica, sino a través de una historia ágil y entretenida. Evidentemente no se trata de un ensayo o una obra historiográfica, sino de una novela con muchos elementos de ficción, pero cumple muy bien el objetivo de sacar a la luz un episodio de nuestra historia que muchos desconocemos.

En conclusión, Morir al sur es una más que recomendable novela negra cuya envolvente trama, mezcla de ficción y realidad, los hará pasar un muy buen rato mientras la leen. A la vez que conocerán un poco más de un lugar y contexto tan lejano para el resto del país como lo es Chiapas.